Cada uno tiene su secreto personal para hacer una hamburguesa americana deliciosa, el nuestro es añadir un poco de mostaza y NO usar pan rallado. Esto da como resultado una carne jugosa y perfecta.
En el recipiente de la batidora o la licuadora, añade dos cucharadas de cebolla picada, un poco de perejil fresco, las dos cucharadas de mostaza, la cucharada de salsa inglesa y el huevo. Tritura hasta integrar todos los ingredientes en una especie de salsa.
Coloca la carne en un recipiente, añade la mezcla anterior y salpimienta al gusto, removiendo bien para que toda la carne quede llena de sabor. El resultado de este condimento será una carne sabrosa y jugosa.
Añade un chorrito de aceite de oliva a una sartén y lleva a fuego medio. Mientras se calienta, prepara tus 4 hamburguesas dándole forma a la carne con el grosor de tu agrado.
Cuando la sartén esté caliente, coloca la carne y déjala cocinar hasta que esté dorada por ambos lados. Pon especial atención a la cocción de la carne según la preferencia de los comensales: al punto o bien hecha.
En otra sartén a fuego medio, dora el bacon hasta que quede a tu gusto. Cuando esté listo retíralo, guarda el aceite que ha soltado y usa esa misma sartén para calentar y dorar ligeramente el pan, impregnado la sartén con el aceite del bacon cada vez que coloques dos nuevas rebanadas. ¡Calentar y dorar el pan realmente marca la diferencia en el sabor!
Cuando la carne esté al punto, añade una loncha de queso cheddar sobre cada una y deja que se derrita ligeramente. Luego coloca cada trozo de carne en una rebanada de pan junto con el bacon, la lechuga, la cebolla cortada en rodajas y el tomate también en rodajas.
Añade las salsas de tu preferencia y ya estás listo para disfrutar de una hamburguesa americana en toda regla. ¡No habrá nadie en casa que se quede sin chuparse los dedos!