Empieza poniendo una olla con agua a hervir y, en cuanto alcance la temperatura de ebullición, echa el huevo. Déjalo quince minutos y después pásalo a un recipiente con agua fría.
Salpimienta ahora las pechugas y hazlas a la plancha con un poco de aceite. Con que estén cuatro minutos por cada lado será suficiente. Luego, hazlas a tiras y pásalas a un recipiente para ensaladas.
Lava la lechuga, cuélala y córtala también a tiras. Añádelas al resto de ingredientes.
Si el huevo ya está cocido y se ha enfriado, pélalo y córtalo en ocho trozos. Intégralo con el resto de ingredientes.
Solo te queda condimentar. Empieza poniendo la sal y después vierte la salsa. Mezcla y, para terminar, echa el queso. ¡A disfrutar!