Siguiendo las instrucciones del sobre, usando la leche, prepara el flan. Si ves que sobre no lleva azúcar tendrás que agregarla tú, la cantidad justa que te marquen o un poco más si las quieres más dulce un poco más.
Mezcla el vaso de leche con el chupito de licor de café y remueve para integrar bien. Echa todas las galletas dentro del vaso.
Cuela la masa que se formará y es el momento de montar tu tarta: primero haz en el molde una capa de galletas, luego recubre con una de flan, luego las galletas y luego el flan... y así hasta que hagas tantas capas como quieras.
Pon la nata líquida a calentarse en una cacerola y le agregas el chocolante fondant, hasta integrarlo bien, con el cuál recubres la última capa que has hecho.
Y a guardar en la nevera unas tres o cuatro horas hasta que consigas una tarta la mar de consistente.