Empieza pelando la cebolla, lávala bien y pícala tan pequeña como puedas. Pásala después a una sartén con un poco de aceite y deja que se poche durante un par de minutos.
Prepara mientras tanto el bacon que, si has comprado en lonchas, tendrás que cortar. Si lo tienes a tiras, puedes añadirlo directamente a la sartén. Déjalo todo al fuego dos minutos pero baja el fuego y mueve para que la cebolla no se queme.
Si ya tienes estos ingredientes, añade a la sartén la nata y pon también un poco de sal y de pimienta negra molida. Remueve.
Sube un poco el fuego y, en cuanto la nata rompa a hervir, apágalo. El queso parmesano lo hemos dejado para echarlo encima de la nata una vez la mezcles con la pasta pero si quieres integrarlo a la salsa, también puedes hacerlo. Dicho esto, ¡a disfrutar! ¡Te va a encantar esta salsa carbonara con nata!