Para comenzar a preparar estas costillas, lo primero que debes hacer es sazonarlas con un poco de sal y pimienta al gusto. Luego enciende el horno y precaliéntalo a 200°C.
Para preparar la salsa, primero pelas los ajos y machácalos en un mortero. Luego pásalos a un recipiente más grande y agrega el vino blanco, la salsa de soja, la miel, el azúcar y el aceite de oliva. Mezcla enérgicamente y reserva.
Coloca las costillas en una bandeja para hornear una junto a la otra y con una brocha de cocina cúbrelas con abundante salsa.
Mete la bandeja al horno durante 1 hora, pero cada 15 minutos, sácala, voltea las costillas y vuélvelas a cubrir de salsa.
Retira del horno cuando las costillas esté bien doraditas y hayan tomado bastante color, no sin antes comprobar que la carne ya esté cocida. ¿Cómo saberlo? Si se desprende fácilmente al cortarla, ya estará lista para comerla.
Sirve tus costillas al horno con miel y soja bien calientes y acompáñalas con las guarniciones de tu preferencia. Esperamos que te haya gustado esta receta. ¡Muy buen provecho!
