Comienza por lavar bien el pollo para retirar cualquier resto de plumas. Lo ideal es que le pidas al carnicero un pollo ya limpio por dentro para facilitarte el trabajo, pero en caso de que no lo hayas hecho deberás retirar las vísceras del interior del ave para dejarla lista para cocinar.
Precalienta el horno a 220 ºC mientras condimentas el pollo, de este modo estará a punto para el momento de la cocción.
Luego mezcla la cáscara de naranja rallada y todas las especias en un recipiente removiendo hasta formar una pasta de aroma intensa con la que vas a untar el pollo por dentro y por fuera. ¡Esto será lo que le dará a tu pollo al horno boliviano su característico sabor!
Coloca el pollo en una bandeja apta para hornear y mete en el horno durante una hora y media. Cuando lleve 45 minutos dale la vuelta y así garantizarás que te quede doradito y bien cocinado por ambos lados.
Pela las papas o patatas y las cortas en gajos, que deberás condimentar con sal, pimienta y un poco de aceite al gusto. Cuando tu pollo lleve 15 minutos horneándose, sácalo y mete las papas, luego introdúcelo en el horno nuevamente.
A medida que avanza la cocción tu pollo al horno boliviano irá soltando sus jugos, te recomendamos usarlos para bañar al pollo cada 20 minutos, así no se te quedará jugoso y lleno de sabor.
Cuando las papas estén doradas retíralas de la bandeja y continúa cocinando hasta que haya transcurrido la hora y media. Luego saca del horno y sirve este rico pollo horneado boliviano ¡verás como todos lo disfrutan!