Tu madre te ha preparado durante toda tu vida tus croquetas favoritas con todo su amor y cariño, pero ahora ha llegado el momento de que seas tu quien le sorprenda a ella con este maravilloso plato y prepares unas deliciosas croquetas de pollo y setas.
Esta receta es una variante de la tradición y, gracias a los trucos que te damos en Unareceta.com, conseguirás dejar a la mejor cocinera que conoces con la boca abierta. ¡Te vas a convertir en su chef favorito!
¿Quieres, además, prepararle un postre? Pues recurre a un brownie de chocolate sin horno que se hace en un momento o a unos deliciosos crepes de plátano. Así que, ¿ya estás decidido a cocinar estas deliciosas croquetas de pollo y setas? ¡Pues vamos allá!
Ingredientes:
- 4 pechugas de pollo
- 400 gr. de champiñones
- 50 gr. de mantequilla
- 1 l. de leche
- 80 gr. de piñones
- 6 cucharadas de harina
- 1 cebolla
- 1 cuchara de nuez moscada
- 1 huevo
- Pan rallado
- Aceite
- Sal
- Pimienta negra
Preparación de las croquetas de pollo y setas
- Para preparar estas croquetas, lo primero que tienes que hacer es lavar la cebolla y pelarla tan pequeña como puedas. Es importante que los trozos sean diminutos porque así notarás el sabor, pero no la textura. Tu bechamel estará mucho más buena.
- Pon la cebolla en una sartén al fuego con un poco de aceite a potencia baja y, mientras esperas a que se poche, ve cortando la pechuga a taquitos. En cuanto esté, échala a la sartén, añade los piñones y deja que se dore todo. Con diez minuto será más que suficiente.
- Lava ahora los champiñones y córtalos también muy pequeñitos. Ponlos en otra sartén con un poco de aceite y sal y déjalos al fuego unos cinco minutos. Tienen que coger un tono doradito.
- Pon en la sartén de los champiñones la mantequilla y, en cuanto esté derretida, añade las pechugas, la cebolla y los piñones y muévelo todo.
- Echa ahora en la sartén la harina y remueve constantemente, sino se te harán grumos. Calienta la leche en un cazo y añádela también a la sartén.
- Incorpora la nuez moscada, una pizca de sal y un poco de pimienta negra y remueve de nuevo. Tu bechamel irá cogiendo consistencia poco a poco así que solo tienes que esperar unos quince o veinte minutos.
- En cuanto esté lista, apaga el fuego y deja que se enfríe. Pasa tu mezcla a un recipiente de cristal y tápala con un film transparente. Si la dejas un horita o dos en la nevera el sabor se irá asentando.
- Ahora que tienes la bechamel, vamos a freírla para hacer las croquetas. Con ayuda de una cuchara ve cogiendo poco a poco pequeñas porciones de masa y ve dándoles forma redondeada.
- Pon en un bol el huevo y bátelo y en un plato plano pon el pan rallado. El proceso ahora es muy fácil, solo tienes que pasar cada croqueta primero por el huevo y luego por el pan.
- Echa un dedo de aceite en una sartén y ve friendo las croquetas una por una. Asegúrate de que no queden muy juntas porque sino no se freirán igual por todas partes. En cuando estén doraditas, después de unos ocho minutos cada una, puedes sacarlas.
- Ponlas en un plato con papel de cocina para que suelten todo el aceite y, en cuanto se enfríen un poco, podrás probarlas. Si has seguido todos los pasos, ¡seguro que has preparado las mejores croquetas de pollo y setas que existen! ¡A comer que se acaban!