Si eres un amante de las croquetas, no puedes perderte esta original receta de croquetas de pollo al curry. Se trata de una elaboración muy parecida a las tradicionales croquetas de pollo pero aderezadas con un suave y sabroso aroma a curry ¿Te apetecen? Pues no te pierdas el paso a paso que hemos preparado en unareceta.com
Al igual que otras tapas como las patatas bravas con alioli o las empanadillas de espinacas, esta receta de croquetas de pollo con curry es perfecta para servir un aperitivo diferente y original cuando vienen invitados a casa ¡Seguro que no te arrepientes de hacerlas!
Ingredientes
Preparación de las croquetas de pollo al curry
- Lo primero será preparar la carne de pollo. Para ello pon una sartén en el fuego con un poco de aceite de oliva. Salpimenta la pechuga y hazla a la plancha hasta que esté bien hecha por dentro y dorada por fuera. Después deja enfriar y desmiga bien finita. Reserva.
- Pela y pica la cebolla lo más fino que puedas. También puedes rallarla si lo prefieres. Reserva.
- En otra sartén limpia pon la mantequilla y derrite a fuego medio. Después añade la cebolla y deja cocinar unos 5 minutos a fuego medios hasta que esté dorada y transparente.
- Añade el pollo desmigado a la sartén y remueve. Después condimenta con un poco de sal, un poco de pimienta negra molida y 3 cucharadas de curry en polvo. Remueve bien.
- Añade la harina a la sartén y tuéstala durante un par de minutos con cuidad que no se queme.
- Cuando se haya integrado bien y haya cogido un todo dorado añade la leche poco a poco y remueve constantemente con unas varillas de cocina para que se integre perfectamente.
- Prueba la masa y añade más sal o curry al gusto y deja cocinar unos 5 minutos sin dejar de remover para que espese.
- Cuando tengas la masa con la consistencia deseada, debe quedar espesa, sácala de la satén y pásala a un recipiente limpio para que repose y se endurezca. Tápala con papel film preferiblemente y cuando ya esté fría pásala a la nevera y deja reposar unas 12 horas.
- Saca la masa de la nevera. Bate el huevo en un recipiente hondo, pon un poco de harina en un plato hondo y un poco de pan rallado en otro.
- Coge porciones de la masa, dale la forma de croqueta que más te guste (rectangular o redonda) y pásalas una a una primero por harina, luego por huevo y luego por pan rallado.
- Por último fríe tus croquetas en abundante aceite de oliva hasta que estén doradas por todos los lados. ¡Que las disfrutes!