Para comenzar lava la pechuga de pollo y luego cuécela a fuego medio en una olla pequeña con sal y abundante agua hirviendo. El pollo estará listo en aproximadamente 15 minutos o cuando esté totalmente blanco en su interior.
Mientras cocinas el pollo ve preparando los demás ingredientes. Para ello pela, lava y corta la cebolla en cuadritos muy pequeños. Luego haz lo mismo con los tomates, el pimiento amarillo y las aceitunas. La lechuga puedes trocearla de trozos medianos con tus manos.
Cuando el pollo esté listo, sácalo de la olla, espera a que enfríe y luego desméchalo en finas tiras. Cuando lo tengas, agrégalo a un bol o ensaladera junto con la cebolla, el pimiento, los tomates, las aceitunas, la lechuga y el contenido de la lata de maíz.
¡Ahora es el turno del aderezo! En un recipiente mezcla la mostaza, la mayonesa, el yogur y la miel, remueve hasta integrarlo todo. Luego añade el azúcar, el zumo de limón y sal y pimienta al gusto y mezcla nuevamente.
Incorpora el aderezo al bol con los demás ingredientes y remueve para aderezar bien la ensalada y lograr que todos los elementos se integren entre sí. Ya está lista tu ensalada de pollo fría para servir, ¿viste qué fácil es? ¡A comer!
