Preparación de bizcocho de naranja y almendra sin harina
Vas a comenzar triturando las almendras en un procesador de alimentos hasta que obtengas una harina fina y reserva.
Después, precalienta el horno a 180°C y prepara el molde cubriéndolo con un poco de aceite y luego con papel para hornear, de esta forma se mantendrá fijo. Reserva.
A continuación, lava las naranjas, pélalas tratando de dejar la parte blanca por fuera y resérvala para el sirope.
Retira la piel blanca y cuando estén completamente limpias, córtalas por la mitad, extrae las semillas y tritúralas en una licuadora o en un procesador de alimentos.
Vierte las naranjas en una olla, añade dos cucharadas de azúcar y cocínalas a fuego bajo durante 25 minutos para confitarlas. Pasado el tiempo, retira del fuego y deja que se templen.
Una vez que las naranjas confitadas se hayan enfriado, bate los huevos junto con el azúcar y cuando obtengas una crema, añade la harina de almendras, el polvo de hornear, la sal y bate para integrar.
Añade la esencia de vainilla y cuando tengas una mezcla uniforme, incorpora la confitura de naranja con movimientos envolventes.
Vierte la mezcla en el molde previamente preparado y hornea durante 50 minutos aproximadamente.
A la media hora y para evitar que se queme o se dore en exceso, tapa el bizcocho con papel aluminio y hornea hasta que esté bien hecho.
Una vez afuera, desmolda cuando se enfríe y si gustas decorarlo, espolvorea el azúcar glas por encima. También puedes cubrir con fondant de chocolate o dejarlo al natural. ¡Qué aproveche!