En una cacerola pondremos el litro de leche junto con la rama de canela y de vainilla. La dejaremos que se vaya calentando y que la leche vaya absorbiendo los sabores.
Como hay que esperar a que hierva, iremos lavando el arroz con agua fría para que suelte todo el almidón que contiene. Luego lo escurrimos bien y, cuando la leche esté hirviendo un poco, lo echamos dentro de la cacerola.
Ahora echamos el azúcar y lo removemos todo bien para que se añada el sabor a la leche y dejamos cocer el arroz durante 30 – 40 minutos hasta que absorba la leche. Ir removiendo de vez en cuando para que no se pegue ni tampoco se queme la leche.
Una vez haya consumido todo el caldo solo hay que repartir las raciones. Podemos echarle un poco de canela en polvo por encima para que tenga un sabor más dulce y colocar unas ramitas de vainilla a modo de decoración.
