Lo primero que harás será pelar las patatas y lavarlas bien bajo el agua del grifo. Luego córtalas en rodajas finas.
Pon a calentar una sartén con abundante aceite de aceite y fríe las patatas a fuego medio durante unos 10 - 15 minutos. Cuando estén doraditas y tiernas sácalas y reserva.
Mientras las patatas se fríen corta el kimchi en trozos pequeños y por otro lado bate los 4 huevos en un recipiente hondo.
Cuando las patatas estén listas, pásalas al recipiente con el huevo y remueve bien para que se mezclen completamente con el huevo.
Agrega ahora el kimchi y añade un poco de sal al gusto. Remueve bien.
Ahora necesitarás una sartén más grande, aunque es mucho mejor si tienes una tortillera para cuando tengas que darle la vuelta a la tortilla. También puedes usar sartenes pequeñas y hacer varias tortillas para tener para varias personas.
Vierte la mezcla, con un poco de aceite en la sartén que vayas a usar, y que se haga bien por debajo a media potencia.
Cuando la base de la tortilla ya esté hecha, le das la vuelta como más cómodo te resulte y que se haga por el otro lado.
Cuando las dos caras estén bien cocinadas y el huevo esté hecho por dentro ya puedes retirar y servir ¡Que la disfrutes!