Calienta la paellera en el fuego con cuatro cucharadas de aceite de oliva. Mientras tanto, pela y corta los dientes de ajo y limpia la carne de pollo y conejo. Luego trocéala.
Con el aceite ya caliente, echa la carne para que se vaya dorando. Cuando haya cogido ese tono, mete las verduras y ve dándole vueltas a todo.
Pon el fuego a baja potencia mientras se van pochando estos ingredientes y, a continuación, mete el tomate rallado natural, los dos dientes de ajos y el pimentón dulce y vuelve a remover.
Añade el agua hasta llegar a los tornillos de la paellera y mete también los caracoles, el azafrán y el colorante.
Incorpora el arroz cuando el agua empiece a hervir. Tienes que ponerlo en forma de cruz, así sabes la cantidad exacta que necesitas. Mueve un poco la paellera para que todos los ingredientes se repartan bien y ponlo a fuego a máxima potencia durante cinco minutos.
Baja ahora el fuego a media potencia y echa dos ramas de romero. Añade también la sal y déjalo todo al fuego durante 18 minutos. Los últimos tres o cuatro minutos pon el fuego al mínimo.
Apaga el fuego después de estos 18 minutos y tapa tu paellera con papel de aluminio. Déjala reposar unos diez minutos para que termine de coger el punto.
Transcurrido este tiempo podrás servirla. ¡Que aproveche!