Antes de ponerte a hacer este plato ten en cuenta las cantidades. La cantidad de nata y yogurt tiene que ser la misma, salvo que prefieras que la salsa sea mucho más suave en lugar de un poco espeso.
Primero de todo exprime los dos limones para obtener su jugo. No lo usaremos todo, pero es bueno que sobre.
En un cuenco, o en el baso de la batidora, vas a mezclar el queso quark con la nata líquida, hasta que se hayan fundo bien ambos ingredientes. Podéis calentarlos en una cacerola si queréis, para que se haga más rápido, pero luego tendrás que dejarla enfriar.
Ya lograda la combinación, agrega tres cucharadas pequeñas del jugo de limón con un poco de sal y pimienta. Bate por un par de minutos y prueba el resultado. Si no te convence, vuelve a agregar un poco más de jugo de limón y salpimienta otra vez, repitiendo el proceso hasta que consigas el sabor que estabas buscando.
Una vez lista, y si todavía no vas a usarla, es bueno dejarla en la nevera, ya que estando fresca es como mejor sabor.
Dicha salsa no solo puedes usarla para acompañar a los nachos, también puede usarse cuando comas carne, patatas fritas... aunque siempre puedes experimentar preparando diferentes salsas para tus nachos, como la guacamole, al estilo mexicano... así si no estás solo, tus invitados tendrán muchas opciones para disfrutar de tus dotes culinarias a la hora de preparar nachos.
