Empieza haciendo la salsa. Para ello, pela una de las cebollas y pícala en dados pequeños. Luego lava los pimientos, quítales las semillas y trocea.
Agrega tres cucharadas de aceite de oliva en un sartén y al calentarse añade la cebolla con un poquito de sal. Una vez que se transparente, incorpora los pimientos, mezcla y cocina hasta que se ablanden.
Vierte el tomate triturado, el azúcar, el orégano, salpimienta y cocina durante 25 minutos a fuego bajo. Pasado el tiempo, aparta del fuego y tritura con la batidora hasta que te quede una salsa fina. Reserva
Ahora, es el turno de los chipirones. Para limpiarlos lo primero es quitarles la piel con cuidado. Luego, mete los dedos en la bolsa sacando las patas y la pluma (el palito transparente).
Después vacía la bolsa, lávala con abundante agua fresca, voltéala y, en cuanto esté limpia, la volteas de nuevo.
A continuación, retira los ojos, la boca, la tinta y mete los tentáculos dentro de los chipirones. Pela los dientes de ajo y la cebolla restante y corta en cuadritos.
Calienta tres cucharadas de aceite de oliva, agrega los ajos, da un par de vueltas y añade la cebolla. Deja pochar durante cinco minutos y luego agrega los chipirones.
Remueve los mariscos para que se mezclen con el sofrito y, en cuanto comiencen a cambiar de color, vierte el vino, rehógalos durante unos minutos y luego incorpóralos a la salsa.
Después de cocer durante diez minutos, tus chipirones en salsa de tomate estarán listos para probarlos. ¡Disfrútalos!
