Comienza tamizando la harina con un colador, colócala en un bol e intégrala con el azúcar glass y la sal.
Abre un hueco en el centro y añade la mantequilla a temperatura ambiente y el huevo, mezcla hasta que obtengas una masa uniforme. Arma una bola, tápala con un film y llévala al frigorífico durante 30 minutos.
Engrasa un molde para tartas con un poco de mantequilla o aceite y agrega un poco de harina, extiende dándole ligeros golpes con las manos y retira el exceso.
Saca la masa del frigorífico, agrega un poco de harina sobre el mesón de la cocina y extiéndela con un rodillo. Cubre la base del molde con ella, terminando de ajustar el tamaño manualmente.
Haz varias marcas con el tenedor y refrigera por 20 minutos. Enciende el horno y precalienta a 180°C.
Saca de nuevo la base del frigorífico y hornea por 20 minutos. Mientras, vas a empezar a preparar el relleno. Extiende las nueces y las almendras troceadas sobre una bandeja y tuéstalas en el horno durante 6 minutos.
A continuación, agrega la miel y la mantequilla a una olla mediana y calienta hasta que se fundan. Sin dejar de mover, incorpora las nueces y las almendras tostadas y cocina por 10 minutos.
Vierte esta mezcla sobre la base y vuelve a hornear por otros 20 minutos más. Retira tu tarta de nueces y almendras del horno y acompáñala con helado o una taza de café o té, una vez se haya enfríado ¡Ya verás como la disfrutas!