Estas Navidades nadie en casa tiene por qué privarse de disfrutar de este clásico dulce, pues con nuestra receta de mazapán sin azúcar fácil y rápido, todos podrán darse un gustazo sin remordimientos.
Y la buena noticia es que esta no es la única preparación ligera y sabrosa que te proponemos para las fiestas, pues con nuestro turrón de yema sin azúcar para nochebuena y nochevieja, y con el sabroso roscón de reyes sin azúcar para la víspera de reyes, tendrás la mesa dulce resuelta para las fiestas.
¿Comenzamos ya con estos sabrosos y ligeros mazapanes? ¡Vamos!
Ingredientes
Preparación del mazapán sin azúcar
- Comienza triturando las almendras hasta convertirlas en un polvo fino. Para ello puedes usar un mortero, una licuadora o una batidora de mano, una vez listas, reserva.
- En un recipiente añade el edulcorante y la ralladura de limón, cuidando de no rallar la parte blanca del mismo para evitar esta zona amarga. La ralladura es opcional pero le aportará un sabor más fresco a este postre, si prefieres la versión tradicional entonces no añadas este ingrediente.
- Incorpora las almendras trituradas al recipiente y mezcla hasta integrar todos los ingredientes. Luego casca los huevos y separa las yemas de las claras, bate las yemas y reserva.
- Añade las claras al recipiente en el que están las almendras, el edulcorante y la ralladura de limón y, con la ayuda de tus manos, mezcla hasta formar una masa compacta y totalmente homogénea.
- ¡Tu mazapán sin azúcar está casi listo! Enciende el horno a 200 ºC para que vaya tomando temperatura y prepara una bandeja para hornear cubriéndola con papel vegetal.
- Ahora deberás formar tus figuras de mazapán, puedes hacer bolitas, cilindros o, si dispones de un molde, usarlo para darle forma a la masa. Ve colocando las figuras en la bandeja y, una vez dispuestas, barnízalas con la yema de huevo que has reservado previamente usando un pincel de cocina.
- Mete los mazapanes sin azúcar al horno y deja cocinar durante 15 minutos, recuerda que deben quedar ligeramente dorados. Sácalos, deja enfriar y sírvelos en tu mesa de dulces navideños. ¡Todos se chuparán los dedos!