Lo más importante a la hora de preparar la mayonesa vegana, al igual que ocurre con la mayonesa tradicional, es procurar que no se nos corte. Para conseguir esto, lo mejor que podemos hacer es intentar que tanto el vinagre, como el aceite de girasol y la leche de soja se encuentren a la misma temperatura.
Si tienes la leche de soja en el frigorífico recuerda sacarla un rato antes para que se quede a temperatura ambiente. Ten esto especialmente presente en verano, ya que en esta época el aceite y el vinagre estarán expuestos a mayor temperatura, y el contraste con la leche será mayor si no recuerdas sacarla.
Pues bien, ahora que tenemos claro que todos los ingredientes tienen que estar a una temperatura similar, vamos a empezar a cocinar. Ponlos todos en el vaso de la batidora y comienza a batir a una velocidad intermedia, hasta que comience a mezclarse todo.
A partir de este momento, comienza a batir de arriba hacia abajo, pero con suavidad. Rectifica de sal si es necesario y continua batiendo un poco más.
Ahora comprueba la densidad de la mayonesa. Si está a tu gusto, deja que se enfría en la nevera. De no ser así, añade un poco más de aceite para darle más cuerpo. Si, por el contrario, ves que está muy espesa, agrega más de leche de soja.
Vuelve a batir hasta que consigas el punto de espesor que deseas y ya tienes lista tu mayonesa vegana. ¡Esperamos que te guste!
