A esta receta de solomillo con queso de cabra le vamos a añadir cebolla caramelizada para darle una combinación de sabores espectacular. Así que lo primero de todo es preparar la cebolla antes de ponernos con el solomillo.
Corta las cebollas en juliana y póchalas a fuego medio-lento con un chorrito de aceite. Para conseguir un buen resultado, es importante que las cebollas vayan pochándose lentamente sin dejar de remover.
Cuando las cebollas ya estén pochadas, añade las cuatro cucharadas de azúcar (blanco o moreno). Sin dejar de remover, cocínalas durante 20 minutos aproximadamente a fuego lento y resérvala.
Ponle sal a los medallones de solomillo y fríelos en una sartén con un chorrito de aceite de oliva. Tienen que estar dorados por ambos lados para que estén listos.
Una vez hayas terminado con los solomillos, pon en la sartén los medallones de queso de cabra a fuego medio-alto. Solamente tienes que pasarlos unos segundos por cada lado, sino se te desharán. Lo importante es que queden marcados por ambos lados con un color dorado.
¡Ya lo tienes todo listo! Ahora solo tienes que emplatarlo: Encima de cada solomillo, coloca un medallón de queso de cabra y cebolla caramelizada. Puedes decorar el solomillo de queso de cabra con un poco de perejil picado o unas virutas de jamón.
También puedes ponerlo encima de una rebanada de pan y hacer montaditos como te mostramos en la foto. ¡De cualquier manera es un éxito asegurado!
