Empieza poniendo el caldo de pollo y la soja en una olla y, mientras tanto, lava las pechugas.
Si el líquido ya ha alcanzado la temperatura de ebullición, vierte en su interior la carne y espera cinco minutos.
Sin apagar el fuego, saca el pollo, desmúzalo y vuelve a incorporarlo. Echa también los fideos y añade un poco de sal. Para saber cuánto tiempo tienen que estar los fideos al fuego tienes que prestar atención a las indicaciones del fabricante.
Lava y corta la lombarda y haz lo mismo con el cebollino. Cuando a los fideos les quede tan solo un minuto, coloca dentro de la olla esta verdura y remueve.
Pon una segunda olla con agua a hervir y cuece los huevos durante diez minutos. Después, espera que se enfríen, pélalos y pártelos por la mitad.
Para terminar solo te queda dividir la sopa en cuatro raciones y colocar en cada una de ellas medio huevo, un poco de cebollino picado y el maíz. ¡Tu ramen de pollo ya está listo!
Consejo:
Si no consigues la lombarda, no pasa nada. Puedes substituir este ingrediente por un poco de coliflor o brócoli. 🥦