Ingredientes
- 3 kg. de cabrito
- 1 pimiento rojo
- 1 copa de vino blanco
- 50 gr. de hígado de cabrito
- 4 dientes de ajo
- 2 hojas de laurel
- Sal
- Pimentón picante
- Aceite de oliva
Preparación de la caldereta de cabrito
- Para empezar, vamos a limpiar la carne de cabrito, eliminando cualquier rastro de grasa o de nervio que veamos.
- Cuando tengas la carne totalmente limpia, córtala a tacos de un tamaño medio y ve dejándolos poco a poco en un recipiente.
- Corta el pimiento rojo a trocitos pequeños y haz lo mismo con los 50 gr. de hígado.
- Pela el ajo, lamínalo y machácalo en un mortero. Pon en una olla grande un chorrito de aceite de oliva y echa el ajo y el pimiento en ella.
- Cuando ambos alimentos hayan cogido un poco de color, añade el hígado y muévelo todo bien para que unos sabores se mezclen con los otros. Cocina todo esto a fuego medio durante unos diez minutos, hasta que el hígado coja un tono bastante dorado.
- Saca con sumo cuidado los trozos de hígado y deja en el interior de la olla el pimiento y el ajo.
- Ahora vamos a dorar los trozos de cabrito en la olla junto a los ajos y el pimiento durante unos diez minutos, manteniendo el fuego a la misma potencia para que se haga bien.
- Machaca en un mortero el hígado que habías cocinado previamente hasta que consigas formar una especie de pasta. Añade la copa de vino blanco y remueve con ayuda de una cuchara. Vierte la masa que has obtenido en la olla junto con un poco de sal y las hojas de laurel.
- Cuando veas que la carne empieza a oscurecerse y a coger un tono marrón, añade pimentón picante al gusto. Si no quieres pasarte con la cantidad, lo mejor es echar un par de cucharadas. Remuévelo todo con una cuchara de madera para integrar los sabores y déjalo a fuego medio durante un par de minutos.
- Pon el fuego a potencia media durante unos ocho minutos más o menos para que se consuma el alcohol del vino blanco, y después baja el fuego a la mínima potencia.
- A continuación, tapa la olla y déjalo a fuego suave durante unos 50 o 60 minutos aproximadamente, hasta que la carne esté bien tierna.
- Una vez que la carne esté lista, apaga el fuego y deja que todo repose en la olla. Comprueba el punto de sal y, si está un poco dulce, añade un poco más.
- Cuando se haya enfriado un poco y veas que la salsa ha ganado un poco de espesor, cocínalo todo durante otros cinco minutos más para que los sabores terminen de asentarse.
- ¡Ya puedes disfrutar de tu caldereta de cabrito!