Preparación de la quiche de jamón y queso sin nata
En primer lugar vamos a preparar la masa quebrada. Para ello colocaremos en un recipiente la harina ya tamizada junto a la mantequilla, cortada en trozos. Mezclamos bien con las manos, y cuando esté, añadimos el huevo y un poquito de sal. Seguimos trabajando la masa.
Cuando tenga la textura apropiada, haremos una gran bola con la masa. La tapamos, y la dejamos aproximadamente una hora en el frigorífico. Pasado ese tiempo la sacamos, y sobre la encimera con un poco de harina para que no se pegue, estiramos bien la masa con la ayuda de un rodillo.
Precalentamos el horno a 180 grados. Ya podemos colocar la masa en el molde que vayamos a utilizar, cubriendo bien tanto al base como los bordes. Cuando el horno esté caliente, meteremos la masa para que se hornee ligeramente.
Cuando esté un poco hecha, la retiramos, y dejamos el horno encendido. No debemos dejarla más que unos minutos, ya que luego va a volver a pasar al horno.
A continuación batimos bien los otros dos huevos con el queso batido, la sal y la pimienta.
Cortamos las lonchas de queso y de jamón serrano a trocitos muy pequeños y las metemos con los dos huevos y el queso. Mezclamos bien.
Vertemos esta mezcla sobre la masa quebrada, con un poco de orégano por encima. Volvemos a poner el molde en el horno, aproximadamente media hora, a 180ºC.
¡Ya está lista para tomar esta exquisita quiche de jamón y queso sin nata! ¡Que aproveche!