Echa la mantequilla, un poco blanda, al vaso de la thermomix junto con el azúcar.
Programa para mezclar a velocidad 4 por 10 segundos.
Seguidamente echa tres huevos y programa a la misma velocidad por un minuto.
Terminado esto, ralla la piel del limón y échala al vaso, junto con la esencia de vainilla.
Mezcla por otros 10 segundos a la misma velocidad.
Incorpora poco a poco la harina y programa a velocidad 4 por 14 segundos. Saca la masa y ponla en una superficie lisa para extenderla bien. Corta un trozo, digamos un tercio de la masa, y con la otra parte recubre el molde que vayas a utilizar con esta parte.
Ahora echa el dulce de membrillo con un chorrito de brandy. Programa a velocidad 2 por dos minutos para que queden bien mezclados. Extiende esta mezcla por encima de la masa. Bate los huevos que te han sobrado y con ellos vas a repintar las tiras, así quedarán doradas y crujientes. Si el huevo no quieres batirlo a mano, solo tienes que meterlo dentro de la thermomix y que se bata por unos 10 segundos.
Corta el tercio que has cortado en tiras y recubre la masa, intentando que no se te quede pegado al molde para que luego no tengas problemas al sacar la pasta.
Mete al horno, a 180º C, por unos 30 – 40 minutos, hasta que esté totalmente listo.