Tras dejar reposar los callos en agua por unas dos horas, los escurres bien hechas a una cacerola grande junto con el morro y las manitas. Llena con agua y deja que hierva. Una vez que el agua empiece a burbujear, la desechas y llenas la cacerola con agua nueva.
Entonces echa el chorizo, el tocino y la morcilla. Remueve y deja que hierva bien.
Pela la cebolla, córtala en cuatro gajos y clávale los clavos de olor. Echa a la cacerola junto con el diente de ajo pelado y la cantidad de sal, pimienta blanca y laurel que consideres oportuna. Tapa y deja que se haga por dos horas y media.
Cuando le quede poco, saca el diente de ajo y la cebolla. Vas a pelar y picar la otracebolla, para echarla a la sartén con un buen chorrito de aceite, el diente de ajo que has cocido y sofreírlo todo. Remueve bien. Echa entonces la guindilla junto con la cucharada de pimentón. Vuelve a remover y echa esta vez la cucharada de harina.
Deja freírse unos minutos y agrega esté preparado al puchero que has preparado de los callos. Que se cueza unos 20 minutos más y ya podrás disfrutar de este fantástico plato.