Preparación de la calabaza rellena de jamón y queso
Vierte cuatro tazas de agua en una olla y ponla a calentar. Mientras esperas a que rompa a hervir, lava las calabazas y córtales los extremos y, cuando el agua esté a punto, coloca dentro de la olla las calabazas. Tápala y espera diez minutos.
Transcurrido este tiempo, las calabazas se habrán cocido un poco pero no estarán muy blandas, que es de lo que se trata. Apaga el fuego y sácalas.
Corta las calabazas en vertical con cuidado y retírales la pulpa con ayuda de una cuchara. Córtala a tacos de unos dos centímetros de ancho. Lava y corta también a tacos el tomate, el jamón y el queso.
Pon ahora la mantequilla en una sartén y caliéntala a fuego suave. Una vez que se haya derretido, incorpora la pulpa de la calabaza. Añade también el tomate troceado, el jamón y el queso y aderézalo todo con sal y pimienta negra molida. Remueve todo el rato para evitar que el queso se pegue.
Déjalo todo al fuego durante diez minutos y, por último, pon las calabazas ya abiertas en una fuente y ve rellenándolas con esta mezcla que acabas de preparar.
Si, por lo que fuese, se te hubiesen roto las cáscaras de las calabazas, no te preocupes, puedes poner el contenido de la sartén en un bol. ¡Su sabor es el mismo! ¡Solo cambia la presentación! ¡A comer!
Consejos y recomendaciones
Si no te gusta el queso azul, no te preocupes, también puedes usar queso manchego o cheddar. ¡La receta está igual de rica!