Deja a la noche anterior los garbanzos ablandándose en un cuenco con bastante agua y un poco de sal, a no ser que los hayas comprado ya directos para echar a cocerse.
Pela y pica la cebolla, junto con los cuatro dientes de ajo. La verdura la pones a pocharse en una olla grande con un poco de aceite.
Una vez dorada, esparces laurel a tu gusto, una cucharada de pimentón, remueve bien.
Pela, trocea y pica los tomates para convertirlos en salsa, los añades y remueves bien para que queden bien integrados.
Ahora escurre bien los garbanzos y los agregas. Recubre con agua y espera hasta que hierva.
Echa un poco más de sal y laurel y deja que se haga por casi una hora.
Lava bien las acelgas bajo el agua del grifo, las troceas y añades a la olla. Reduce el fuego y deja que se haga por 15 minutos.