Comenzamos por las fresas. Lo primero que harás será sacarlas del empaque, colocarlas en un colador y lavarlas con abundante agua. Luego desecha las hojitas y corta la fruta en finas láminas.
Listas las fresas, es el turno de las espinacas. Abre el paquete de espinacas, desechas aquellas hojas que estén en mal estado y desinfecta el resto en un bol con agua y vinagre. Luego deja que las espinacas se escurran en un colador.
Si no has comprado las almendras tostadas, pon a calentar una sartén y cuando esté bien caliente tuesta las almendras durante tres minutos a fuego medio. ¡Listo!
Corta el queso feta en tacos medianos en caso de que no lo hayas comprado ya picado. Luego incorpora las espinacas, las fresas, el queso y las almendras en una ensaladera. Remueve para integrar y reserva.
Mezcla en un bol el zumo de limón, el yogur griego, dos cucharadas de aceite de oliva y sal y pimienta al gusto. Remueve bien hasta que todos los ingredientes estén bien integrados. ¡Ya tienes el aderezo!
Baña la ensalada con el aderezo y remueve con una paleta de madera para integrar bien todo. Sirve inmediatamente tu ensalada de espinacas con fresas y disfruta. ¡Buen apetito!