Lo primero que tienes que tener claro es que tipo de salmón quieres usar: si el salmón cortado en lonchas o la carne del filete. Te explicaremos ambas formas de hacerlo.
Comienza encendiendo el horno ya a 180º C y así se irá precalentando mientras trabajas en el plato.
Corta los calabacines justo por la mitad y luego le quitas la carne del interior con una cucharada. Toda esta carne la cortarás en trozos en forma de cuadrados y la reservaras.
Por otro lado, pela y corta la cebolla y los dientes de ajo en trozos tan pequeños como te sea posible. Ahora ponlo a freírse todo junto con la carne que le has quitado a los calabacines.
Si el salmón lo vas a utilizar en lonchas, córtalas en tiras no demasiado largas ni demasiado gruesas y las echas a la sartén. Si es un filete, ponlo a freírse mientras se hace la verdura. Una vez listo, lo desmenuzas y añades al plato con la verdura.
Salpimienta todo y deja que se haga por unos cinco minutos a fuego suave.
Ahora rellena el interior de los calabacines, recubre con queso rallado si lo deseas y mete al horno para que se haga por unos 25 – 30 minutos aproximadamente.