Preparación de las alcachofas con almejas y almendras
Deja las alcachofas limpias retirándoles las primeras hojas exteriores y después corta la punta de las alcachofas y recorta un poco de la piel de los tallos sin llegar a cortarlos. Cubre las alcachofas con el zumo del limón.
Vierte agua para cubrir las alcachofas en una olla y añádeles una pizca de sal. Calienta esta agua a fuego fuerte y, cuando comience a hervir, incorpora las alcachofas para que cuezan durante quince minutos o hasta que estén tiernas. Cuela las alcachofas y reserva el caldo de cocción.
Bate el huevo en un plato hondo y corta cada alcachofa por la mitad y rebózalas primero por el huevo y luego por la harina. Vierte ahora un poco de aceite de oliva en una sartén, caliéntalo a fuego medio y fríe en él las alcachofas. Según las vayas apartando, pásalas a un plato forrado con papel de cocina absorbente y resérvalas.
Pela los dientes de ajo y pícalos muy finos. Lava y pela las gambas, de las cabezas te puedes deshacer porque solo vamos a utilizar los cuerpos.
Vierte un poco de aceite de oliva en una sartén y sofríe en él los ajos. En cuanto se doren echa en la misma sartén las gambas. Rehógalas durante ocho minutos.
Incorpora en esta misma sartén las almejas y la cucharada de harina y rehoga también. Vierte el vino blanco junto con un vaso del caldo de cocción de las alcachofas e incorpora las alcachofas. Deja que hierva todo junto durante dos minutos y espolvorea un poco de perejil picado por encima.
Filetea ahora las almendras y tuéstalas en una sartén sin aceite. Ya puedes poner el contenido de la sartén en platos y ponle por encima las almendras. ¡Ya tienes tu plato listo! ¡Al fin puedes degustar tus alcachofas con almejas y almendras! ¡Verás lo riquísimas que te han salido!
