La noche antes a preparar este cocido gallego con acelgas debes poner las alubias a remojo. Es muy importante que se hidraten ya que sino no quedarán blandas a la hora de hacerlas y esto estropearía notablemente el plato.
Ya al día siguiente, lo primero que debes hacer es cortar y pelar las patatas, enjuagarlas bien y cortarlas en trozos pequeños. Llena dos ollas de agua y ponlas al fuego. En una de ellas tienes que poner los huesos y las alubias con un poco de sal. En la otra olla tienes que incorporar las acelgas para que pierdan la acidez.
En cuanto los huesos lleven veinte minutos de cocción, retíralos y pon en esa olla las patatas y continúa cociendo. Las acelgas, por su parte, tienes que dejarlas solo dos minutos. En cuanto haya transcurrido ese tiempo, sácalas y échalas en la otra olla. Incorpora también el unto.
Deja cocer todos los ingredientes juntos durante dos horas y, llegado ese momento, prueba de sal y rectifica si fuera necesario. Apaga el fuego, aparta tu cocido gallego con acelgas y ya puedes servirlo cuando desees. ¿Has visto qué fácil de preparar resulta? ¡A disfrutar!
