Antes de empezar a preparar tu salsa de calabaza asada, precalienta el horno a 200°C para que tenga la temperatura ideal al momento de hornear la calabaza. Ahora sí, ¡empezamos!
Lava la calabaza, deshecha las semillas y retira la piel. Luego córtala en trozos medianos. Pela, lava y corta la cebolla en cuadros medianos también.
En una fuente para hornear, incorpora los trozos de cebolla y de calabaza y esparce por encima el orégano, la sal, la pimienta y un poco de aceite de oliva.
Mete la bandeja en el horno y deja cocer la verdura durante 45 minutos o hasta que notes que está totalmente tierna. Mientras la calabaza y la cebolla se hornean puedes ir hirviendo la pasta.
Si ya ha pasado el tiempo, saca la verdura del horno, agrega un vaso de agua a la bandeja y tritúralo todo. Rectifica el gusto de sal y orégano y añade abundante queso parmesano. Mézclalo todo y ya tienes tu salsa de calabaza asada lista, ¡a comer!
Consejos y recomendaciones
Esta salsa de calabaza asada es ideal para acompañar pastas largas como el espagueti o el vermicelli.