La preparación de este cocido gallego con repollo comienza el día anterior cuando deberás poner las alubias blancas y las carnes en remojo en recipientes separados. La finalidad de este paso es conseguir ablandar los ingredientes.
Al día siguiente, saca las alubias del recipiente y déjalas escurrir en un colador; haz lo mismo con las carnes. Mientras los ingredientes se escurren, pela las patatas y córtalas en cuadros medianos. Lava el repollo y córtalo en ocho partes.
Para empezar a cocinar el cocido gallego con repollo, coloca dentro de una olla grande y honda las alubias junto con la grasa de cerdo, sal y agua hasta el tope. Deja cocer a fuego alto hasta que hierva el agua.
Cuando el agua comience a hervir, baja el fuego al mínimo y añade las carnes y los huesos, deja cocer todo lentamente para que agarre más sabor durante aproximadamente dos horas y media. Mientras el tiempo transcurre no olvides remover de vez en cuando el guiso.
Si durante el tiempo de cocción notas que la olla se está quedando sin agua o el líquido ha reducido a la mitad, incorpora un poco más de agua, pero sin llevar el nivel hasta el tope de la olla.
Cuando hayan pasado las dos horas y media, retira la olla del fuego y deja reposar la preparación veinte minutos. Luego retira la grasa de cerdo que no se haya derretido, calienta nuevamente el caldo a fuego medio y añade el repollo y las patatas.
Deja cocer la preparación durante treinta minutos más o hasta que notes que el repollo y las patatas están cocidos. Luego rectifica la sal y retira del fuego. ¡Ya está listo tu cocido gallego con repollo! Sírvelo bien caliente y buen provecho.