Los caracoles con tomate y cebolla son una forma fácil y rica de preparar este alimento, al igual que los caracoles con chorizo y jamón. En los países del Norte de Europa, como Reino Unido, no es muy común comer estos moluscos pero en España es muy habitual, sobre todo en Andalucía o en la Comunidad de Madrid, donde incluso tienen su receta de caracoles a la madrileña.
Estos caracoles con tomate y cebolla se pueden comer como primer plato a mediodía pero también a la hora de cenar. En Unareceta.com te explicamos hoy cómo preparar este delicioso manjar. ¡Vamos allá!
Ingredientes
Preparación de los caracoles con cebolla
- Lo más importante antes de cocinar los caracoles es asegurarnos de que están totalmente limpios. Déjalos durante dos o tres días con un poco de agua, harina y con alguna hierba aromática. Así lograrás que se purguen bien.
- Una vez transcurridos estos días, lávalos con cuidado en agua fría y sal y cambia el agua tantas veces como sea necesario. Sabrás que los caracoles están limpios cuando el agua que estés utilizando se quede transparente del todo.
- Cuando los caracoles hayan dejado de soltar babas, ponlos en una olla con todo el agua que necesites para cubrirlos y añade una hoja de laurel. Cuécelos a fuego fuerte para asegurarte de que salgan de su cáscara. La finalidad es engañarlos y si la potencia del fuego no es la suficiente, puede ser que los caracoles no salgan. Retira todo aquello que pudiese flotar en la superficie con una espumadera.
- Mientras tanto, ve pelando el kilo de tomates y la cebolla y córtalo todo en pequeños pedazos.
- Cuando lo hayas troceado todo, fríelo en una sartén a fuego medio. Añade el pimentón cuando veas que todo coge un tono dorado.
- Si ves que los caracoles ya han salido de sus cáscaras, echa toda la salsa a la olla, sino espera. A continuación, añade un poco de sal y baja el fuego.
- Cuando haya transcurrido una media hora, añade la pimienta blanca y la guindilla. Cuando consigas el punto picante que deseas, retira la guindilla y baja el fuego al mínimo durante unos diez minutos para conseguir intensificar el sabor.
- Ya tienes tus caracoles con tomate y cebolla listos. ¡Que aproveche!