Tu primer paso es precalentar el horno a 180°C. Te recomendamos que si puedes conseguir el bacalao fresco o congelado siempre será mucho mejor que el salado, sobre todo para esta receta “light” en la que debes tener a raya la cantidad de sal y aceite que utilizarás.
Si vas a usar el pescado congelado, asegúrate de descongelarlo con suficiente tiempo de antelación, sécalo bien antes de usarlo. Si por el contrario consigues un buen lomo de bacalao fresco, lávalo debajo del grifo, sécalo, córtalo en 4 trozos y salpimienta. Reserva.
Pela las cebollas y córtalas en rodajas. Los ajos lamínalos después de pelarlos también. Lava el calabacín y córtalo en rodajas finas. Lava el perejil, corta finamente y reserva para el final.
Calienta el aceite de oliva en una sartén y agrega las cebollas, espolvorea un poco de sal y deja pochar por unos minutos a fuego medio. Después agrega los ajos, da un par de vueltas y retira todo a un plato.
Vierte la cebolla pochada con los ajos en una fuente, luego coloca las rodajas de calabacín y encima acuesta las rodajas de bacalao con la piel hacia arriba.
Añade finalmente las aceitunas y cubre con el aceite de oliva sobrante.
A continuación, hornea durante 20 minutos. Si el pescado está muy grueso debes aumentar el tiempo de cocción. Cuando hayas comprobado que ya está listo, retira del horno.
Sirve tu bacalao al horno light mientras esté bien caliente y decora con el perejil picado. ¡Qué lo disfrutes!
