Para empezar a preparar este delicioso plato pon a precalentar el horno a 200°C. Luego pela las patatas, lávalas y córtalas en rodajas muy finas. Pela la cebolla, retira la primera capa y córtalas en rodajas también. Reserva.
Para esta receta tienes que utilizar dos fuentes de vidrio. Los muslos de pato confitado los tienes que colocar en una de ellas; en la otra tienes que poner una cucharada de la grasa del pato y extenderla con la ayuda de una espátula. Coloca en esta última las verduras.
Pela los ajos, aplástalos dándoles un golpe y échalos junto a las patatas y demás. Agrega otra cucharada de grasa de pato y espolvorea por encima de todo un poco de sal y de pimienta negra molida.
Lleva las dos fuentes al horno y hornea durante quince minutos. Cuando el pato ya esté dorado y las verduras tiernas, retira del horno ambas bandejas y reserva en un lugar templado en donde se pueda conservar el calor.
Reparte el vino entre ambas fuentes y desglasa con una cuchara de madera, de esta manera los jugos que se adhirieron durante la cocción a la fuente se despegarán. Coge una olla pequeña y vierte ahí el caldo de pollo. Ponlo al fuego.
Disuelve en una taza la maicena con dos cucharadas de caldo frío, agrégalas a la salsa y rectifica la sal. Cocina a fuego bajo sin dejar de mover hasta que la salsa espese ligeramente. Sirve tu confit de pato al horno acompañado por esta rica salsa y la guarnición de verduras asadas. ¡Verás qué rico! ¡Muy buen provecho!
