Para preparar el caldo tenemos que llenar una olla con agua fría y ponerla a hervir a media potencia. Cuando empiece a hervir agregamos los huesos, el codillo y el tocino. Dejamos por alrededor de media hora y entonces agregamos los garbanzos. Reducimos el fuego a baja potencia y dejamos que se cueza todo por un par de horas.
Pasado ese tiempo agregamos el pollo y dejamos que se haga por otra media hora.
Pelamos la patata y la lavamos bien para cortarla en dados, así como también troceamos la col. Dejar apartados para cuando lo vayamos a añadir.
El caldo idlo controlando porque se irá formando espuma, así como el agua se evaporará, de modo que ir retirando la espuma y agregando agua cuando sea necesario.
Vamos a preparar ahora la pelota: batimos bien el huevo en un cuenco y en otro ponemos la leche para poner las rebanadas de pan en remojo.
Salpimentamos la carne y la metemos en el huevo, empezando a mezclarlo todo con las manos. Cuando la carne absorba el huevo, agregamos el pan bañado en leche y procedemos a hacer la mezcla con las manos, hasta formar una mezcla homogénea y que sea de fácil manejo.
Ponemos una sartén al fuego, con bastante aceite, en la que haremos las pelotas. Vamos cogiendo trozos de la mezcla e iremos creando pelotas con las manos, del tamaño que más nos guste. Luego las rebozamos y las pasamos por la sartén por alrededor de unos cinco minutos para que se doren.
Al haber pasado la media hora, agregamos la patata, la col, la butifarra y las pelotas, para que se cueza todo por unos 20 minutos.