Lo primero que debes hacer es limpiar bien las espinacas. Corta los tallos duros y fibrosos y reserva las hojas con los tallos tiernos. Lava bien y escurre con un colador.
Coloca un poco de agua en una olla. Agrégale sal y ponla al fuego. Cuando rompa a hervir incorpora las espinacas y cocina durante 8 minutos.
Retíralas del fuego y escúrrelas en un colador. Presiónalas con un tenedor, para eliminar el exceso de agua. Trocéalas y resérvalas en un recipiente.
Pela los ajos y filetéalos con un cuchillo bien afilado, deben quedar lo más finito que puedas lograr.
Agrega el aceite de oliva y la mantequilla a un sartén grande y cuando estén caliente agrega los ajos fileteados. Remueve con una cuchara de madera por unos segundos e incorpora el pimentón dulce en polvo.
Es importante que en esta ni en ninguna preparación dejes quemar el ajo, cuando esto sucede se vuelven muy amargos y pierden sus propiedades culinarias.
Cuando el ajo comience a cambiar de color, incorpora las espinacas y mezcla bien todo. Rectifica la sal y agrega un toque de pimienta negra a tu gusto. Deja cocinar por 5 minutos más para que los sabores se integran.
Transcurrido este tiempo ya podrás retirar del fuego tus espinacas salteadas con ajo. Si quieres volver a cocinar este plato, varíalo agregando cebolla, pimentón, piñones, bacon o incluso el queso de tu preferencia, quedan muy ricas con todo lo que se les ponga. ¡Muy buen provecho!