Preparación de los calamares rebozados con cerveza
Para empezar, lo primero que debes hacer es lavar las anillas de calamar ya que aunque quizás vengan completamente limpios de la pescadería siempre pueden contener aún algún resto que debas desechar.
Enjuágalos varias veces bajo el chorro del grifo y a continuación ponlos en un colador con un poquito de sal por encima.
Ahora echa la cerveza en un recipiente grande, e incorpora poco a poco la harina de trigo previamente tamizada para evitar que se formen grumos.
Con ayuda de unas varillas manuales, ve mezclando bien los ingredientes hasta que se forme una especie de salsa. Añade algo más de harina si te parece que la mezcla no está muy espesa, echa sal al gusto y continúa removiendo. Esta será tu mezcla para rebozar.
Ahora pon aceite de oliva suficiente para freír en una sartén a fuego alto. Seca perfectamente los calamares para que agarre bien el rebozado, cuando el aceite esté bien caliente reboza alrededor de 8 calamares y fríelos ligeramente separados en la sartén para que queden bien crujientes.
Es importante que no frías muchos calamares en una misma tanda porque el aceite se enfriará y el resultado no será tan crujiente como debería. Cuando estén dorados retíralos a un plato cubierto con papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
Continúa repitiendo la operación hasta que hayas freído todos los calamares.
¿Quieres darle una mejor presentación al plato? Entonces corta un limón en rodajas y colócalas alrededor de la bandeja donde los servirás. También puedes exprimirlo por encima de los calamares a la hora de comerlos para darles un toque delicioso.
¡Y nada más! Ya tan solo te queda sentarte a la mesa, y saborear estos riquísimos calamares rebozados con cerveza. ¡Verás cómo ha merecido mucho la pena probar esta receta! ¡Corre, que no se enfríen!
