Preparación de los calabacines a la plancha con miel
Para preparar este exquisito plato, en primer lugar lava con abundante agua los calabacines, e incluso déjalos en remojo unos minutos, ya que para esta receta les vamos a dejar la piel.
Pela la cebolla, lávala y córtala en juliana. Pon un fondo de aceite de oliva virgen extra en una sartén, y caliéntalo a fuego medio.
Cuando el aceite esté a buena temperatura, echa la cebolla a la sartén y échale con una pizca de sal. No añadas demasiada, ya que se trata tan solo de que la cebolla suelte sus jugos y se haga mejor.
Una vez que empiece a pocharse la cebolla, échale dos cucharadas de miel, y baja el fuego al mínimo. Remueve para conseguir que la miel vaya reduciendo y la cebolla se caramelice.
Mientras se carameliza la cebolla, corta en rodajas finas los calabacines sin pelar. En una plancha ves dorando las rodajas de calabacín.
No tienes que dejarlas mucho tiempo, ya que el calabacín casi en su totalidad es agua, y solo hay que dorar las rodajas vuelta y vuelta.
Coloca los calabacines ya hechos en una fuente y añádeles por encima la cebolla caramelizada.
Reparte los taquitos de jamón serrano por toda la superficie, y baña con el resto de miel todos los ingredientes.
Y ya están listos para tomar los calabacines a la plancha con miel. Así que ya sabes, no dejes que se enfríen y corre a la mesa a saborear tus deliciosos calabacines. ¡Que aproveche!