Como estos cake pops salados se preparan en un momento, en primer lugar ponemos el horno a precalentar a 190ºC.
Mientras se calienta el horno, hacemos la masa de los cake pops. Para ello vamos a tamizar la harina para quitarle grumos y le añadimos la levadura y una pizca de sal. Removemos para mezclarlo todo bien.
Batimos aparte el huevo y le añadimos la leche y un poquito de aceite de oliva. Removemos hasta conseguir una mezcla homogénea.
Añadimos la harina con la levadura a la leche y continuamos removiendo hasta que se mezcle todo bien.
Rallamos el queso curado y la mozzarella y los añadimos a la mezcla junto con el queso cremoso. Removemos constantemente para que se integren bien con la mezcla que hemos preparado antes.
Vertemos sobre el molde para hacer cake pops hasta rellenarlo entero. Introducimos al horno y dejamos que se haga aproximadamente durante 30 minutos, comprobando de vez en cuando por si estuvieran hechos antes.
Apagamos el horno, retiramos el molde y dejamos que se enfríen los cake pops. Cuando ya estén fríos, les colocamos unos palillos para cake pops.
¡Y esto es todo! Ya podemos comenzar a tomar estos sabrosos cake pops salados fáciles. Como su propio nombre indica, un alimento sencillo de preparar pero que no te dejará indiferente. ¡Verás qué ricos están! Esperamos que te haya gustado esta receta.