Retira las primeras hojas de las alcachofas y enjuágalas bien. Después cuécelas en agua con un poco de sal hasta que estén tiernas. A continuación cuélalas, y pon a precalentar el horno en modo grill.
Mientras que el horno se va precalentando, vierte un poco de aceite de oliva en una sartén, e incorpora las setas ya limpias y aderezadas con pimienta negra molida y sal. Saltéalas hasta que estén hechas, sin excederte, para que no queden demasiado secas.
Aprovecha para ir preparando las alcachofas. Hazles un corte por abajo, para que se asienten bien sobre la bandeja del horno. Una vez que tengas listas las setas, rellena las alcachofas con ellas.
Coloca las alcachofas sobre la bandeja del horno, forrada con papel de aluminio o papel vegetal. Corta el queso de cabra en medallones, y colócalos sobre las alcachofas.
Introduce la bandeja en el horno, y gratina a 160ºC hasta que el queso de cabra esté dorado y ligeramente fundido.
Ya están listas tus alcachofas rellenas de setas. Te recomendamos que las tomes ahora que están bien calentitas, ya que sin duda alguna así es como más ricas saben. Esperamos que te haya gustado esta receta, y ahora, ¡a disfrutar!
Nuestro truco:
Después de lavar las alcachofas, y antes de ponerlas a cocer, puedes rociarlas con un poco de zumo de limón para que no se pongan oscuras mientras tanto.
