Preparación de las manitas de cerdo al horno crujientes
Lava las manitas bien, y échalas en una olla con una cebolla, un puerro, dos dientes de ajo sin pelar y la rama de perejil. Añade sal a tu gusto, y cuece estos ingredientes durante 3 horas, vigilando si tienes que añadir más agua.
Si utilizas una olla rápida, bastará con una hora desde que empiece a salir el vapor.
Pasado este tiempo aparta las manitas, y reserva el caldo de la cocción. Espera a que se enfríen un poco las manitas, y deshuésalas con cuidado. Coloca la carne sobre papel film, enróllalo y espera a que se enfríe del todo. Pasa la carne al frigorífico durante unas 3 horas.
Cuando hayan pasado las 3 horas pon a precalentar el horno a 190ºC.
Derrite la mantequilla en un cazo o en el microondas, y ve pintando con ella las láminas de pasta filo. Junta tres láminas y córtalas en cuatro cuadrados. Repite la operación hasta formar todos los cuadros que necesites para cubrir los trozos de manitas que reservaste.
Coge uno de los cuadrados que has preparado, pon un trozo de carne de manitas en el centro, levanta las cuatro esquinas y gira para cerrar el saco. Repite la operación hasta terminar con los ingredientes.
Una vez que hayas preparado todos los sacos, píntalos con el resto de la mantequilla y colócalos en la bandeja del horno, sobre una base de papel para hornear.
Pasa la bandeja al horno y hornea los sacos con la carne de las manitas durante 8 minutos a 190ºC.
Aprovecha ese tiempo para empezar a preparar la salsa. Para ello tienes que echar un chorro de aceite de oliva en una sartén, y echa dos cebollas picadas, dos dientes de ajo y el pimiento. Salpimenta a tu gusto y sofríe estos ingredientes a fuego bajo, hasta que estén tiernos.
Echa un par de cazos del caldo de cocción que reservaste. Prueba de sal y pimienta, rectifica si fuera necesario y tritúralo todo bien. Si lo deseas, puedes añadir más caldo y cocer a fuego medio con la crema triturada diez minutos más.
Para emplatar tienes que poner la salsa en el plato, y colocar los sacos recién horneados encima. Echa unos granos de pimienta y listo, ¡ya puedes servir tus manitas de cerdo al horno crujientes! ¡Están deliciosas, ya lo verás!
