Preparación del confit de pato con patatas al horno
Vierte bastante agua en una cazuela, y ponla a calentar. No esperes a que llegue a hervir, ya que vas a utilizarla para hacer un baño María.
Si los muslos están envasados al vacío, colócalos dentro de otra cazuela y ponla al baño maría. Retira el plástico, y calienta los muslos hasta que la grasa esté líquida. Si son enlatados, introduce en la cazuela la lata abierta, cuidando de que no entre agua.
Tanto en uno como en otro caso, cuando la grasa se ponga translúcida, aparta los muslos en un plato y deja que se enfríen. Calienta la masa que han desprendido los muslos en una sartén, a fuego medio-alto.
Pela las patatas, y córtalas en lonchas dándoles la típica forma panadera. Cuando se caliente la grasa, confita las patatas en ella. Para ello la grasa no debe estar a mucha temperatura, y las patatas deben tener espacio bastante entre ellas, y estar cubiertas totalmente de grasa.
Si lo deseas puedes añadir un poco de sal, aunque al ser un plato confitado no es necesario.
Dependiendo del grosor de las patatas, estarán listas en 10-15 minutos aproximadamente. Solo tienen que estar blandas, no doradas. A continuación debes sacarlas, apartándolas a un plato con papel de cocina absorbente, para que suelten el exceso de grasa.
Precalienta el horno a 220-230ºC a modo grill. Coloca papel de aluminio o vegetal en la bandeja del horno, y reparte las patatas por ella.
Encima debes poner los muslos de pato, primero con la piel hacia abajo, y a medida que vaya gratinando, darles la vuelta para que se gratinen por el otro lado también.
Pasados 15-20 minutos ya estará listo tu confit de pato con patatas al horno. Así que tan solo te queda apagar el horno, apartar y servir este estupendo plato. ¡Que aproveche!
Nuestra recomendación:
Si lo deseas, puedes servir este plato con un poco de mermelada de frutos rojos o de fresa por encima, ¡le dará un toque de sabor espectacular!
