Lo primero que debes hacer es lavar bien los espárragos, luego corta con un cuchillo o con la mano el extremo inferior, son aproximadamente de 3 a 4 centímetros.
Si te quieres asegurar de no cortar más de lo debido dóblalos, los espárragos se partirán por el lugar adecuado. Luego, con un cuchillo afilado o un pela patatas pela el tronco hasta que descubras la parte blanca, eso si, no toques la punta que se puede romper.
Vierte el aceite de oliva en una plancha o en un sartén y cuando esté caliente agrega la cantidad de sal marina que desees y extiéndela, inmediatamente coloca los espárragos uno al lado del otro y añade un poco de zumo limón.
Cocina cada lado de los espárragos durante 5 minutos a fuego lento, de esta forma evitarás que se quemen. Aplástalos ligeramente con una cuchara de madera para que no te queden partes crudas.
Cuando los espárragos trigueros a la plancha estén completamente dorados y tostados, sírvelos en un plato y agrega un poco de aceite de oliva, pimienta negra y unas gotas de zumo de limón. ¡Y ahora ha llegado el momento de probarlos! ¡Muy buen provecho!