Lo primero de todo es limpiar bien los calçots con agua para eliminar la tierra que puedan tener. Después les quitas la primera capa, y les cortas la cola. La mejor forma de hacerlo es cortar un tercio de la cebolleta y dejar los otros dos tercios para cocinar.
A continuación tienes que hacer una salsa para bañar los calçots antes de pasarlos por la plancha y tengan mucho más sabor.
Para ello echa en el vaso de la batidora el aceite de oliva, la rama de perejil, el diente de ajo, una pizca de pimienta negra y un pizca de sal. Bate la mezcla hasta formar una salsa.
Calienta la plancha y con ayuda de un pincel pinta la superficie de los calçots con la salsa que has preparado.
Cuando la plancha esté caliente ve haciendo las cebolletas en grupos de cinco y las planchas unos 3 minutos por cada lado, hasta que estén bien tostadas.
Una vez tengas todas las cebolletas listas lo último que tienes que hacer es ponerlas en una bandeja grande y los calçots a la plancha están listos para comer ¡Qué aproveche!
