Ingredientes
- 400 gr. de queso Philadelphia
- 2 tazas de nata líquida
- 1 taza de leche entera
- 3/4 taza de azúcar glas
- 6 láminas de gelatina neutra
- 1 cucharadita de aceite vegetal
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
Preparación de la panna cotta de queso
- Empezarás poniendo a hidratar la gelatina en un recipiente con un vaso de agua fría. Colócalas de manera que no se peguen entre ellas y déjalas reposar mientras preparas la panna cotta.
- Mezcla en una olla la nata, la leche, el azúcar glas, la vainilla y el queso con la ayuda de unas varillas manuales hasta que todo se integre.
- A continuación, cuece a fuego medio sin dejar de remover. Cuando rompa a hervir, aparta del fuego.
- Escurre las láminas de la gelatina con las manos e incorpóralas a la nata cocida, como está caliente se derretirá a medida que la remuevas. Antes de servir, asegúrate que tenga un punto de dulzor que sea de tu agrado.
- Engrasa los moldes con un poco de aceite vegetal y así te facilitarás notablemente el desmolde.
- Vierte la mezcla de la panna cotta en moldes individuales, vasos o un único molde grande y déjala enfriar por un par de horas antes de llevarla al frigorífico para que cuaje.
- Una vez que tu panna cotta de queso esté lista, desmóldala y sírvela acompañada de sirope de chocolate, caramelo, café, frutas o nueces molidas. ¡Combina con todo, ya lo verás!