Preparación de las ostras gratinadas con salsa holandesa
Lo primero que tienes que hacer es la salsa y para ello tienes que colocar una olla con agua al fuego lo suficientemente grande para que quepa el bol donde vas a mezclar la salsa.
A continuación, coge el bol y echa en él las yemas, el agua y el vinagre y mezcla con un batidor manual. Cuando el agua rompa a hervir, coloca el bol sobre el agua y continúa batiendo. Es importante que no dejes de batir para que los huevos no se cocinen. Si sientes que el recipiente se está calentando mucho, aparta momentáneamente del fuego para que se enfríe un poco.
Derrite la mantequilla en el microondas y, una vez que la salsa haya aumentado de tamaño, échala lentamente al bol sin dejar de batir. Cuando esté lista, reserva.
Abre ahora las ostras con un cuchillo y vacía el contenido en un recipiente. Lava las conchas, desecha las tapas y reserva las más cóncavas para gratinar.
Retira los tallos de las espinacas, láva las hojas y trocea finamente. Calienta el aceite de oliva en una sartén, añade las espinacas, el perejil y remueve y, después de dos minutos, agrega la nata y mezcla. Vierte el jugo de las ostras y cuando haya reducido un poco, salpimienta y retira del fuego.
Para armar las ostras, cubre una bandeja con sal marina y coloca las conchas seleccionadas encima. Agrega una porción de crema de espinacas, luego las otras y cubre finalmente con la salsa.
Enciende el grill a 200°C y, cuando esté caliente, mete la bandeja al horno y gratina durante tres minutos. Cuando estén doradas, retira y sirve inmediatamente. ¡Y listo! ¡A disfrutar de tus ostras gratinadas con salsa holandesa!
