Huevos revueltos

Huevos revueltos

¿Quién no ha saboreado alguna vez unos deliciosos huevos revueltos?

Preparar un revuelto de huevos no tiene ningún misterio, aunque sí existen algunos trucos para conseguir que queden esponjosos y cremosos. Si además les añadimos algún ingrediente, conseguimos auténticos platos deliciosos y lo mejor de todo, muy económicos.

Si no eres un experto en la cocina, tienes poco tiempo y los huevos son tu debilidad, ten a mano siempre Unareceta.com para consultar las mejores recetas de revueltos de huevos que puedes preparar en pocos minutos y no habrá paladar que pueda resistirse. Con gambas, champiñones, jamón, bacon, al estilo americano, tu escoges cuál te gusta más.

Receta de huevos revueltos con jamón

Si quieres un desayuno completo y saludable, prepara unos cremosos huevos revueltos con jamón y acompáñalos con un buen smoothie de frutas, una combinación ideal que te llena de energía para afrontar el día y además es muy fácil de cocinar. Estos son los ingredientes que necesitas para dos personas:

Ingredientes:

  • 4 huevos
  • 2 lonchas de jamón serrano o cocido
  • 1 pizca de sal
  • 1 cucharada sopera de mantequilla
  • 2 cucharadas de leche

Preparación de huevos revueltos con jamón

  1. Bate enérgicamente los cuatro huevos en un bol. Para que te queden con la textura ideal, debes batir hasta que aparezcan burbujas.
  2. Añade entonces las dos cucharadas de leche y vuelve a batir. Es indiferente que sea entera, desnatada o semidesnatada.
  3. Corta el jamón serrano o cocido bien finito y dóralo en una sartén pequeña y antiadherente con la cucharada de mantequilla.
  4. Cuando el jamón esté listo, es el momento de añadir el huevo. Vuélcalo en la sartén y baja el fuego al mínimo.
  5. No debemos manipular ni remover el huevo hasta que no esté cuajado por abajo.
  6. Después empezamos a remover con movimientos suaves y envolventes hacia adentro.
  7. Cuando el huevo esté cremoso y no suelte demasiado líquido, apílalo en el centro de la sartén, añade una pizca de sal y apaga el fuego.
  8. El calor residual de la sartén acabará por hacerlos. Ojo con la sal si utilizas jamón serrano, pues ya de por sí es bastante salado.
  9. Sirve bien caliente y disfruta de una receta llena de proteínas.

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