Lo primero que vamos a hacer es poner a hervir agua en una olla. Luego prepararemos ahí la pasta.
Ahora enjuaga los tomates, pélalos y córtalos y haz lo mismo con la cebolla y con los ajos. Cuanto más pequeños sean los trozos, mejor quedará la salsa.
Pon en una sartén el chorrito de aceite junto con la cebolla y el ajo a fuego medio hasta que cojan un tono dorado. Añade un poco de sal.
Si el agua ya está hirviendo, mete los espaguetis. Tienen que estar unos ocho minutos a fuego medio pero lee el paquete de la pasta porque hay veces que el tiempo de cocción puede variar.
Echa en la sartén la 1/2 taza de aceite y los tomates y tapa la sartén. Pon el fuego a potencia media durante unos diez minutos.
Cuando haya transcurrido este tiempo, si el tomate ya ha empezado a hervir, añade el orégano y muévelo todo otra vez. Baja el fuego y deja la salsa con la tapa. Tienen que estar otros diez minutos.
Si los espaguetis ya están listos, escúrrelos y deja que se enfríen un poco. Luego, mételos otra vez en la olla.
Prueba la salsa y si el punto de sal es el bueno, apaga el fuego. Mete la salsa que creas conveniente en la olla. Si te ha sobrado salsa puedes guardarla en un recipiente de cristal y, cuando se enfríe, meterla en el frigorífico porque se conserva bien.
Añade el atún y el queso rallado a tus espaguetis con tomate. ¡Ya tienes tu plato listo!
