Lava bien los champiñones hasta retirarles toda la tierra que contengan. Si vienen con el final del tronco, córtaselo antes, ya que en esa parte concentran demasiada tierra y no se puede quitar por completo. El resto del tronco lo puedes utilizar.
Una vez que tengas limpios tus champiñones, lamina tanto los sombreros como los troncos y haz lo mismo con los dientes de ajo. En cuanto lo tengas todo listo, ponlo en una sartén con aceite. Echa un poco de sal y pimienta a tu gusto.
Déjalo todo al fuego unos diez minutos a potencia media y, cuando veas que los champiñines están dorados, incorpora el jamón a tacos. Continúa sofriéndolo todo hasta que los champiñones estén totalmente hechos y el jamón se haya cocido, esto solo te llevará cinco minutos más.
Ahora tienes dos opciones; puedes echar el queso rallado por encima en la sartén, taparla, bajar el fuego y esperar a que se funda un poco el queso o puedes pasar el contenido de la sartén a un plato grande, espolvorear el queso por encima y pasarlo al microondas para fundir el queso allí. Elige la que más te convenza.
¡Y nada más! Ya están listos tus champiñones con jamón y queso, ¡sírvelos cuanto antes, no sea que se enfríen! ¡Muy buen provecho!